Hay muchos motivos que explican por qué vemos pocos antibióticos en proceso de desarrollo clínico para tratar la gonorrea. Como he mencionado antes, esta bacteria empieza a ser muy resistente a los antiguos antibióticos como el ciprofloxacino o la azitromicina, y nos hemos quedado solo con el inyectable ceftriaxona. Aquí hay un bonito resumen que explica que gran parte del problema es que la industria farmacéutica ve muy problemático y poco rentable invertir en el desarrollo de nuevos antibióticos. Además, su uso en un futuro próximo será muy restringido y vigilado por las autoridades.
https://www.catie.ca/treatmentupdate-245/shrinking-options-for-antibiotics-in-gonorrhea